Los socorridos y resistentes jeans… Un poco de historia

SXVII. Aparecen prendas de vestir de un tejido resistente de algodón (similar a la pana) teñido en azul índigo llamado fustaneum. Los pantalones estaban pensados para llevar tanto secos como mojados y para poder remangarlos y evitar asi que las perneras entorpecieran los movimientos. Las vestía la armada de la ciudad de Génova-. En Inglaterra comenzaron a emplear el término jeans para referirse a estas prendas, aludiendo al nombre de esta propia ciudad (Genes).

En este mismo siglo un pintor llamado El maestro de los pantalones vaqueros azules nos descubre a través de su obra como los vaqueros ya eran empleados por los trabajadores textiles del norte de Italia.

Los vaqueros fueron exportados por los marineros genoveses a toda Europa.
Más tarde en la ciudad francesa de Nimes intentan reproducir el fustaneum y crean un nuevo tejido que seguramente a todxs os suene muy familiar: el denim (de Nimes). Este tejido era más grueso e inicialmente se usaba para confeccionar batas o guardapolvos.

jeans

En 1860 Levi Strauss descubre el tejido denim y decide que es más adecuado para la confección de sus prendas, sustituyéndolo por la lona que hasta ahora había empleado. Es en este momento cuando el vaquero empieza a parecerse al pantalón tejano que conocemos hoy en día.
Su uso trasciende a otros sectores, de forma que comienza a ser empleado por otros trabajadores, cowboys y vaqueros. De aqui el nombre.

Su mayor aceptación llega en los años 60, después de que actores y actrices de Hollywood lo luzcan como una prenda moderna y desenfadada. Se consolida en los 70, para quedarse definitivamente.

Una prenda que perdura hasta nuestros días sin perder el encanto que cautivó a aquellos jóvenes de los años 50, y que después de tantos años todavía nos tiene enamoradxs.